Almohadas de Cristal
Te soy sincero…
Escribí en tu espalda con tinta dorada
Y atrape un pensamiento entre mis manos
Atrévete a decirme que la noche no es clara
Ahora que te sostengo del cuello
Te soy sincera...
Maldije tu nombre al caer el ayer
Jure en vano por tí, a fin de aliviar mi propia pena
Cayendo sin quererlo en algo que temia sentir
Heme aquí arraigada a una sola alma
¿Por qué no me tienes miedo?
El velo de tu alma muestra destellos de plata
Y me he vuelto una prolongación de tus sueños
Esas son notas de dolor en tus sollozos
Un abrazo que corta el sentido del tiempo
¿Por qué no me tienes miedo?
Te he hecho mio contra tu voluntad, contra la mía
Que es el canto que me arrulla sino tu recuerdo
Mezcla vana e ímpia de las mieles del amor
Una caricia, un beso para mi gran señor
Aprendiste a encontrarme…
En el sol naciente, un viajero oculto
Que durmió junto a la luna de Enero
Bajo la refrescante lluvia de Noviembre
Penas y alegrías del amor…
Aprendiste a encontrarme…
En la caída de las lagrimas de angeles,
En el cobijo de una voz sincera y quebrada
En los momentos más personales que temes revelar
Pacto de antiguos jurados por un corazón
¿Por qué me sonríes?
En el silencioso reino de tu entrega
Me llevas transparente entre la niebla
Las horas encuentran un camino hacia el amor
Un camino de piedras blancas en el universo
¿Por qué me sonríes?
No sabes el dolor y la dicha que causas
Hilador de fantasías que son más afiladas que la realidad
Tejedor de redes para sueños frágiles
Creador de una palabra que morira en mis labios
Soy la oscuridad en el día…
He venido a robarte el mundo
A enamorar las estrellas y atrapar tus suspiros
La voz que recorre los deseos invisibles
Admirando tus batallas, sacrificios y dolor
Soy la oscuridad de la noche...
Me has arrebatado mi voluntad
A cantar de imagenes que ahora son parte de mí
El pudor que pierde significado por la pasión
Anhelando tu fuerza, libertad y osadía
Hubo un tiempo…
En el que conocí una chica diferente
Gobernamos el mundo, creí que nunca la perdería
Éramos muy jóvenes, siento que me descuide demasiado
Aún recuerdo las suplicas, de aquel que sufrió primero
Hubo un tiempo…
En que perdí la esperanza en la gente
Tirania vestida de sarcasmo y juegos infantiles
Era inútil pelear contra la necesidad de ser amada
Callarse y llorar en silencio por una pena de amor
Te confieso algo…
Fue en los días en que mi corazón sangraba
Cuando me desvanecí entre sabanas y almohadas de cristal
Y mis malos recuerdos son solo tinta en tu espalda
La cual lastimo con mis uñas cada vez que quemo tu
corazón
Te confieso algo…
Fue cuando me dolía el alma y mis heridas habitaban mi
piel
Cuando dije una mentira que se volvió mi realidad
Y grite pidiendo tu piedad de la unica forma que pude
Clamando tu nombre solo para mi, pidiendo nunca despertar
нет ни капл души,
Везде пороги,ну а ты не сдавайся-дыши.
нет ни капл души,
Везде пороги,ну а ты не сдавайся-дыши.
